Nuestro proyecto propone investigar hasta que punto los andaluces y las andaluzas podrían sufrir discriminaciones en razón de sus acentros y modos de pronunciación. Es evidente que existe una gran variedad de acentos andaluces en las diversas provincias, que cuentan, además, con especifidades locales. No obstante, nuestro estudio no pretende analizar aspectos lingüisticos sino que se centra en las implicaciones sociales de la forma de hablar de los andaluces, tal y como ellos y ellas las perciben. Asimismo, pretendemos identificar casos concretos en los que su pronunciación ha constituido un lastre para el avance profesional y situaciones de discriminación en razón del acento. Para ello, trabajamos con una muestra de población suficientemente diversificada en función del sexo, la edad, la promoción profesional y la clase social.